El auge de la práctica de algunos deportes como el running, ha conllevado la aparición de una serie de conceptos en nuestro lenguaje que hasta el momento probablemente no conocía la población en general. Esto ocurre, por ejemplo, cuando vamos a comprar el calzado perfecto para practicar deporte y nos preguntan ¿pronador o supinador? No todo el mundo tiene claros estos conceptos y, por ello, hoy desde Fisio Lobera queremos dar las claves para saber cómo es tu pisada.
Precisamente los dos tipos de pisada más comunes son de los que hablamos hoy, pronador o supinador. Saber qué tipo de pisada tienes no es una cuestión difícil. Hay una serie de cuestiones que te ayudarán a identificarlo a simple vista:
- Suela de zapato. Si observas la suela de tus zapatos y la parte interior es la más desgastada, esto podrá significar que tienes una pisada pronadora. Si ocurre lo contrario y la parte más desgastada de tu calzado es la exterior, entonces tu pisada será supinadora.
- Inclinación de los pies. Incluso ante un espejo podrás encontrar los primeros síntomas de si eres pronador o supinador. Si ves que tus pies se inclinan hacia dentro, pronador, y si es hacia fuera, supinador. También cabe la posibilidad de que no se inclinen hacia ninguna de las dos posturas.
- Pisadas en la playa. Siguiendo las mismas conclusiones que en las situaciones anteriores, si observas tu pisada en un firme blando como la arena de la playa, también podrás saber en qué zona ejerce más presión tu pisada.
Tener uno u otro tipo de pisada conlleva una serie de características y riesgos a tener en cuenta.
Características del pie pronador.
La pisada pronadora supone apoyar el pie con la parte interior del talón y, por consiguiente, pisar con la zona del arco e impulsarse con el dedo gordo del pie. Este tipo de pisada puede conllevar una serie de lesiones si no se corrige a tiempo. Puede acarrear problemas posturales, así como dolores en cadera, rodillas e incluso en la espalda. De ahí la importancia de acudir a profesionales, podólogos o fisioterapeutas, que podrán ayudar a conseguirlo.
Características del pie supinador.
Por lo contrario, una pisada supinadora implica apoyar el pie con la parte exterior del talón e impulsarse con los tres últimos dedos del pie. Este tipo de pisada es menos común que la anterior. Las consecuencias de este tipo de pisada pueden ser problemas en músculos, tendones, esguinces o fracturas.
En Fisio Lobera, como fisioterapeuta en Zaragoza, una vez más queremos que se tome la prevención como la mejor de las armas para evitar males mayores, por lo que tanto si eres pronador o supinador, acude a profesionales para conocer cuáles pueden ser las medidas a tomar al respecto.